El paisaje no es el habitual. La niebla oculta la ciudad. Entre las nubes se entrevén las gruas de las obras del castillo y el campanario de la catedral. Ahí abajo está mi ciudad, pero no la veo. A veces algo nos tapa lo importante y no lo vemos por más que lo miremos.
Ahí estamos.
Últimamente me pierdo algunas cosas importantes. Creo.
1 comentario:
...pues habrá que pisarle al gas o apretar el freno. Algo habrá que hacer ¿no crees?.
:-)
Publicar un comentario